Desarrollo estas notas reflexivas
a partir de la coordinación de una mesa de ponencias en LAS JORNADAS SOBRE
AGRICULTURA Y SOBERANÍA ALIMENTARIA ORGANIZADAS EN LA UNIVERSIDAD DE MURCIA POR
LA RED DE AGROECOLOGÍA DE LA REGIÓN DE MURCIA (29-31 de enero de 2014, ver
entrada anterior).
El
desarrollo agroalimentario de la Región de Murcia (y de otras regiones
mediterráneas de características similares) especialmente con toda la expansión
de los cultivos de agricultura intensiva para la exportación en fresco,
significó la marginación de las vegas tradicionales, dado que su implantación tuvo
lugar sobre antiguos secanos sometidos a profundas transformaciones
territoriales y biofísicas mediante el uso intensivo de agua, agroquímicos,
etc. Esto estuvo vinculado a la inserción de estos nuevos enclaves productivos
en largas cadenas de producción-distribución y consumo que implican costosos
sistemas de transporte para llevar las frutas y hortalizas a mercados muy
lejanos territorialmente. Esto presenta indudables problemas de sostenibilidad
social y ambiental como estamos tratando de demostrar en el proyecto de
investigación ENCLAVES. Para una sucinta presentación de estos problemas véase
el artículo en 2010 de Manuel Delgado, profesor de Economía de la Universidad de
Sevilla e investigador de ENCLAVES El Sistema Alimentario Globalizado: Imperios alimentarios y degradaciónn social y ecológica
Al mismo tiempo que se
territorializaba este sistema agroalimentario globalizado de frutas y
hortalizas para fresco, las viejas vegas de huerta, que se habían mantenido
estables durante cientos de años, no solamente se les marginaba en la
producción de alimentos, sino que además se les sometía a un brutal proceso de
lapidación bajo cemento, asfalto y promociones inmobiliarias. Esta última
década y media de burbuja inmobiliaria ha sido una catástrofe para estos
espacios de huerta.
La Mesa Redonda que me ha tocado
coordinar en las Jornadas se sitúa en esta encrucijada que tomando como eje de
reflexión el proceso de producción agroalimentario, problematiza tanto la sostenibilidad
social y ecológica de estos sistemas globalizados, como también la propia
concepción de la ciudad y los desarrollos metropolitanos.
El primer ponente en la Mesa,
Gregorio Ballesteros, se centró en el fenómeno en expansión en los últimos años
de los huertos urbanos en los espacios metropolitanos (como tuvimos ocasión de
conocer en la visita a uno de estos huertos en el madrileño barrio de Lavapiés,
durante la reunión del Grupo de Trabajo de Sociología Rural en el último
Congreso de la Federación Española de Sociología en julio de 2013). Ballesteros
presentó una cuantificación del fenómeno de los huertos urbanos que se ha
realizado de cara al IIº Congreso de Agricultura Urbana y Periurbana que
celebrará en Utrera en Marzo de 2014. Han contabilizado que este fenómeno
abarca a 300 ciudades en el Estado Español con una totalidad de 15000 huertos
urbanos. Destacó la coincidencia de la expansión de los huertos urbanos con el
despliegue de la crisis global, y la importancia de los movimientos sociales en
el desarrollo de los mismos.
A
partir del texto de "Agricultura urbana, sostenibilidad y soberanía alimentaria: hacia una propuesta de indicadores desde la agroecología", de
Marta Soler (Universidad de Sevilla e investigadora de ENCLAVES) y Marta G.
Rivera (UAB), el ponente planteó las características de esta producción a pequeña
escala contrastándola con los efectos insostenibles del sistema alimentario
globalizado. Utilizó el importante trabajo de Infante y González de MolinaAgricultura y decrecimiento. Un análisis del ciclo de vida del sistema agroalimentario español para mostrar los altos consumos
de energía fósil que requiere el sistema agroalimentario español, muy
especialmente por sus necesidades de transporte, uso de plásticos y embalajes,
etc. Precisamente esta perspectiva es desde donde el equipo de Manuel Soler
estudia el caso de ENCLAVES sobre la agricultura de invernadero del campo de
Dalias.
El segundo ponente de la Mesa, Alberto Matarán, presentó un caso de
estudio muy interesante sobre un proceso de activación ciudadana mediante lo
que denominó “conciencia de lugar” y “participación territorialista” (conceptos
teorizados por el Catedrático de Urbanismo Alberto Magnaghi). La revitalización
de un viejo sistema agroalimentario local (la Vega de Granada) como producto de
la movilización social (y de resistencia a los procesos inmobiliarios). La
propuesta de un Parque Agrario por parte del Plan Especial de la Vega de
Granada no se quedó en los papeles gracias a la acción ciudadana de huertanos y
movimientos sociales que han generado una iniciativa en red de producción,
distribución y consumo agroalimentario que se extiende por todo el espacio de
la vega granadina. Véase sobre este proceso la Comunicación que se presentó en
el último Congreso de la Federación Española de Sociología:"El conocimiento ecológico tradicional como instrumento fortalecedor del compromiso ciudadano en la conservación de espacios naturales" de Juan Francisco Bejarano, Adolfo J.
Torres y otros.
Andrés Pedreño.